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FRASES CÉLEBRES

Dicen que el hombre no es hombre mientras no oye su nombre de labios de una mujer.

El amor crea en la mujer, una mujer nueva; la de la víspera ya no existe al día siguiente.

El que ha conocido sólo a su mujer y la ha amado, sabe más de mujeres que el que ha conocido mil.

En sociedades destrozadas por la guerra, frecuentemente son las mujeres las que mantienen a la sociedad en marcha. . . Usualmente son las principales defensoras de la paz.

En todo momento de mi vida hay una mujer que me lleva de la mano en las tinieblas de una realidad que las mujeres conocen mejor que los hombres y en las cuales se orientan mejor con menos luces.

Hay una mujer al principio de todas las grandes cosas.

La fantasía del hombre es la mejor arma de la mujer.

FRASES CÉLEBRES

Las mentes que controlan la televisión son tan pequeñas que cabrían en el ombligo de una mosca, y aun quedaría espacio para el corazón de un director de cadena.

En California no tiran la basura: la convierten en programas de televisión.

El periodismo es la literatura con prisa.

Las buenas noticias siempre llegan tarde; las malas, demasiado pronto.

¡La prensa, el cuarto poder…!

La televisión nos proporciona temas sobre los que pensar, pero no nos deja tiempo para hacerlo.

FRASES CÉLEBRES

Cuando un médico recomienda a un enfermo que cambie de aires es que no sabe qué hacer con él.
El 30 por 100 de los alimentos que consumimos nos mantiene vivos; con el 70 por 100, se mantienen vivos los médicos.

La libertad y la salud se asemejan: su verdadero valor se conoce cuando nos faltan.

Vive en esta vecindad
cierto médico poeta,
que al fin de cada receta
pone Mata y es de verdad.

La medicina es un arte conjetural que casi carece de reglas.

Cuatro cosas es necesario extinguir en su principio: las deudas, el fuego, los enemigos y la enfermedad.

La primera riqueza es la salud.