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FRASES CÉLEBRES

Nacer, vivir, morir

Hay dos grandes días en la vida de una persona, el día en que nace y el día que descubre para qué.

Raro y celestial don: el que sepa sentir y razonar al mismo tiempo.

Se conoce el corazón del hombre por lo que hace, y su sabiduría por lo que dice.

El sol puede morir y nacer, pero nosotros una vez apagada nuestra breve claridad, hemos de dormir una sola y eterna noche.

No hay más que tres acontecimientos importantes en la vida: nacer, vivir y morir. No sentimos lo primero, sufrimos al morir y nos olvidamos de vivir.

Si nacimos para morir, no tiene sentido.
Solo tiene sentido, cuando encontramos la razón de la vida.

El parto es la única cita a ciegas en la que puedes estar seguro de que conocerás al amor de tu vida.

Como no me he preocupado de nacer, no me preocupo de morir.

Gobierno - Gobernar

Como no podemos cambiar a los hombres a cada paso, cambiamos las instituciones.

Para un gobierno injusto, el mártir es más nocivo que el rebelde.

El que puede gobernar a una mujer, puede gobernar a una nación.

Quien no sabe gobernar es siempre un usurpador.

Gobernar es pactar; pactar no es ceder.
Un país gobernado por la opinión no lo está por la competencia.

La razón del estado no se ha de oponer al estado de la razón.

Gobernar no es mandar, por mucha mayoría que se tenga.

El gobierno despótico es un orden de cosas donde el superior es vil y el inferior está envilecido.

Gobernar significa rectificar.

Confiamos demasiado en los sistemas y muy poco en los hombres.

FRASES CELEBRES

El amor le da vida al sexo y el sexo le da vida al amor.

La medida del amor es amar sin medida.

El amor es el olvido del yo.

El amor vive más de lo que da que de lo que recibe.
Hay un camino seguro para llegar a todo corazón: es el amor.

El amor aborrece todo lo que no es amor.
El amor es la poesía de los sentidos.
Es tan absurdo pretender que un hombre no puede amar siempre a la misma mujer,
como pretender que un buen violinista no puede tocar siempre el mismo instrumento.

El amor es el gran refugio del hombre contra la soledad,
la inmensa soledad que le ha impuesto la naturaleza,
la especie, las leyes eternas.