La naturaleza no hace nada superfluo, nada inútil, y sabe sacar múltiples efectos de una sola causa.
Un árbol es un vecino muy peligroso en una tormenta.
Un paisaje se conquista con la suelas del zapato, no con las ruedas del automóvil.
No puede encontrarse bajo el firmamento ni un solo ser, animal o criatura,
que no tenga su contrario. Es una ley de la naturaleza.
Contemplar las flores es sedante. No despiertan emociones ni conflictos.
El viento endereza el árbol después de haberlo inclinado.
La naturaleza está siempre en acción y maldice toda negligencia.
La naturaleza y el arte parecen rehuirse, pero se encuentran antes de lo que se cree.
El que ha nacido para reptar no podría volar.
No es menester arte donde basta la naturaleza. Sobre la afectación donde basta el descuido.
Solo la naturaleza hace grandes obras sin esperar recompensa alguna.
Jamás dice la naturaleza una cosa y otra la sabiduría.
El mar solo tiene un defecto, y es que, cuando se le conoce, no se puede pasar ya sin él.
En todos sus sueños más bellos, el hombre no ha sabido jamás inventar nada que sea más bello que la naturaleza.
Llovió tan fuerte que todos los cerdos se lavaron y todos los hombres se emporcaron.
Divina calma del mar,
Donde la luna dilata
Largo reguero de plata
Que induce a peregrinar.
El hombre no puede vivir donde las flores degeneran.